Los escarpines son un calzado que va en la maleta de muchas personas de forma habitual, ya sea porque practican deportes de agua o porque van a bañarse en ríos o en playas con piedras y quieren proteger sus pies.
Con este tipo de calzado hay que tener cuidado. Nos aporta ventajas pero también inconvenientes. Desde elviso Fisioterapia y Podología os dejamos algunas recomendaciones para utilizar los escarpines sin perjudicar nuestro cuerpo.
¿Qué son los escarpines?
Calzado ligero y cerrado formado por una sola suela
Material: neopreno elástico que previene la abrasión
Útiles para deportes acuáticos, compatibles con aletas
Uso recomendado para estancia en playa o piscina con actividad, evitar su uso fuera
No confundir con calzado minimalista
Patologías que pueden favorecer los escarpines
Fasciopatía por sobreuso de este calzado fuera de la playa o piscina
Tendinopatías por mala gestión de cargas. Uso prolongado y repetido fuera de la actividad deportiva
Dolor articular por compresión ósea o escasa amortiguación
Distrofias en las uñas por uso excesivo
Infecciones por hongos. El agua estancada en el calzado favorece su aparición
Lesiones que evitamos con los escarpines
Papiloma o verruga plantal
Rozaduras y cortes
Abrasiones
Mejor mantenimiento de la temperatura corporal
Quemaduras solares (junto con crema solar)
Deportes en los que se utilizan escarpines
Deportes de tabla, ya que mejora la adherencia
Buceo (evita que la aleta pierda su posición correcta)
Escalada o exploraciones en rocas en calas
¿Qué podemos hacer para mejorar el uso de los escarpines?
Trabajo de movilidad y estiramiento previo de pies y dedos
Fortalecimiento de la musculatura intrínseca ‘core’ del pie
Propiocepción y control motor
Uso solo en las actividades que lo requieran