El dolor de rodilla es muy común entre la población y bastante incapacitante, ya que afecta a la articulación clave para el movimiento. Desde elviso Fisioterapia promovemos una fisioterapia proactiva, donde una gestión de cargas adecuada entre el fisio y el paciente optimiza una temprana vuelta a la actividad deportiva de forma segura.
La aparición de dolor en la rodilla suele ser súbita, tras una lesión o esfuerzo físico del que a veces ni siquiera hemos sido conscientes, como contusiones o torsiones que en principio podrían parecer poco importantes. Hay condiciones que predisponen a sufrir dolor de rodilla, como el sobrepeso, con un posterior agravamiento por sobrecarga que desgasta los meniscos, las estructuras fibrocartilaginosas presentes en la articulación de la rodilla.
El uso excesivo o inadecuado de la articulación también conduce al dolor. Es el caso de personas que fuerzan la articulación al hacer deporte sin seguir una pauta guiada de menor a mayor intensidad o que practican deporte ocasionalmente, sin calentar o estirar y sobrepasando las propias capacidades de su organismo.
El dolor en la rodilla también puede producirse sin que medie una lesión de impacto, cuando el paciente sufre infecciones o enfermedades como artritis o gota.
Algunas afecciones que pone de manifiesto el dolor de rodilla
- Fractura de la rótula o huesos adyacentes. Es un hueso poco protegido y susceptible de rotura ante caídas o golpes en la rodilla.
- Ruptura de meniscos, muchas veces fruto de paradas o giros repentinos que desgarran el cartílago. El dolor se deja sentir en la zona interior o exterior de la articulación.
- Bursitis. Inflamación de la bursa, pequeña bolsa rellena de líquido que protege y amortigua las articulaciones. Provoca rigidez y dolor en la zona y sensibilidad al presionarla.
- Ruptura de ligamentos. La rotura del ligamento cruzado anterior es de las más comunes. Conlleva dolor intenso y falta de estabilidad que suele provocar la caída al suelo de la persona en el momento de sufrirla.
- Torsiones como mecanismo de lesión de esguinces.
- Sobreesfuerzos o mala gestión de cargas como mecanismo lesional del desgarro, distensión o rotura de fibras (‘pinchazo’).
- Condropatía rotuliana. Muy habitual en corredores. Cursa como un dolor inespecífico en toda la rodilla o en la cara anterior de la misma.
- Además de las lesiones, algunas enfermedades o infecciones generan dolor en la rodilla. Es el caso de artritis o gota entre otras.
Tratamiento y alivio del dolor
La recuperación en estas lesiones requiere disciplina por parte del paciente y continuidad en la aplicación de las medidas o evitación de determinados movimientos.
- Lo más inmediato es reducir la práctica de ejercicio, sin llegar a interrumpirla si no es estrictamente necesario. La actividad es la mejor manera de prevenir, por ejemplo, el avance de enfermedades como la artrosis, que suele ser una de las razones más habituales por las que vemos pacientes con dolor de rodilla en consulta.
- Solo mantener reposo si así lo aconseja el profesional médico. Es importante consultar a un fisioterapeuta o traumatólogo que valore la lesión, si es necesaria alguna intervención quirúrgica o el protocolo de recuperación.
- Fisioterapia y rodilleras pueden lograr un alivio importante del dolor, pero a veces es necesario valorar opciones más invasivas que solo un profesional podrá aconsejar. También conviene consultar remedios caseros habituales como frío, calor, compresión o elevación.
- La fisioterapia suele ser muy beneficiosa para el dolor de rodilla, ya que permite personalizar el tratamiento para cada paciente y dolencia. Tras el análisis y valoración por parte del fisioterapeuta, el profesional decidirá aplicar la terapia manual más beneficiosa para el paciente. En elviso Fisioterapia contamos, además, con tecnología de vanguardia para el alivio del dolor con aparatología y método Human Tecar, altamente efectivo en recuperación de lesiones y alivio del dolor.
Prevenir el dolor de rodilla
Si tenemos la suerte de no sufrirlo, hay hábitos que podemos incluir en nuestra vida cotidiana para evitar que aparezca:
- Mantener hábitos sanos de alimentación y ejercicio para no incurrir en sobrepeso.
- Preparar nuestro cuerpo antes de la práctica de cualquier deporte, con ejercicios de estiramiento y flexibilización.
- Entrenar para el fortalecimiento de la musculatura, ya que la debilidad muscular es una de los principales factores que favorecen las lesiones de rodilla.
- Adaptar el ejercicio que practicamos si sufrimos dolencias crónicas. Limitar las actividades de alto impacto como correr. Sustituir algunos días el ‘running’ por la práctica de la natación, elíptica o deportes menos agresivos.
- Al practicar deporte, elegir un buen calzado que sujete bien el pie y amortigüe el impacto.
Ante cualquier molestia en la rodilla, no dudes en visitarnos. Tenemos un equipo de traumatólogos y fisioterapeutas de primer nivel que realizarán un análisis y valoración personalizada y te aconsejarán las mejores opciones para aliviar el dolor o tratar cualquier lesión. Puedes reserva cita en los teléfonos 689 023 943 o 918 188 982.